sábado, 12 de enero de 2013

Cómo mejorar tus alforjas: QuickLock a la chilena

Sin duda uno de los implementos indispensables al momento de hacer cicloturismo son las alforjas. En ellas llevaremos nuestra ropa, comida, accesorios de campamento e infinitas cosas que podemos necesitar para nuestras travesías.
En el mercado hay diferentes tipos de alforjas. Las más conocidas son la marca alemana Ortlieb que con su sistema de anclaje QuickLock y su material totalmente impermeable hacen que sean una de las cómodas y prácticas disponibles. También están las Vaude o diferentes modelos de confección nacional, cada uno con sus pros y contras.

Alforjas Nuhidal de 3 cuerpos.
En todos mis viajes con alforjas he ocupado unas chilenas marca Nuhidal, que en un comienzo cumplian con las 3 B´s ($25000 en el año 2009). Unas alforjas de 3 cuerpos semi-independientes (los dos laterales van unidos entre si, con la opción de anclarle un tercer cuerpo superior). Pero con el tiempo me fui dando cuenta de algunas de sus limitaciones y requirieron varios upgrades.


Durante el primer viaje entre la IX y X región, recorriendo cerca de 450kms durante 9 días aprox. aprendí sobre lo complicado de anclarlas a la parrilla con un sistema de correas, que si bien quedaban bastante fijas  al llegar a un lugar y tener que desmontarlas era un poco complicado. El segundo problema era su estructura endeble dada solo por el género que las compone, sin ninguna estructura rígida lo cual a ratos hacía que chocara con la rueda.


Para el segundo viaje me puse en contacto con el fabricante y me conseguí los moldes de las alforjas, y usando un material ligero de plástico les hice una estructura rigida para la pared interna, evitando el roce con el neumático, teniendo un viaje mucho más cómodo por la ruta de los 7 lagos en Argentina.
Para el tercer viaje en el tramo norte de la Carretera Austral, con bastante lluvia a ratos eché de menos unas Ortlieb, y ya había improvisado unos cubre mochilas pero para el tamaño de las alforjas, el cual cumplió bien su rol de impermeable.
Cubre mochilas modificado para el tamaño de las alforjas.

Sistema de pletinas de fierro: ganchos y barra de metal unidos
por pernos.
Sin duda han sido unas buenas alforjas durante estos 3 años de pedaleo, pero lo que siempre quise fue un sistema de anclaje sencillo y en forma independiente de ambas alforjas a la parrilla. Viendo varios modelos de la marca chilena Avalancha y otras por ahí implementé un sistema de anclaje con pletinas de fierro y un sistema de elástico contratracción que permite un anclaje simple y efectivo, probado hasta ahora solo en Santiago. El sistema consta de 2 ganchos por alforjas, unidos a una barra de fierro interna (para darle estabilidad) y apernados. Además de un elástico de fijación que genera una tracción para evitar la caida de la alforja en caso de saltos. Aquí algunas imágenes de la implementación. Espero les sea de utilidad si no quieren gastar mucho dinero en alguna tipo Ortlieb o similar, que tampoco ofrecen 100% de seguridad por su composición de plástico(he visto romperse ganchos Ortilieb en medio de la nada, quedando con las alforjas en la mano).





Sin embargo, el sistema de ganchos de pletina resultó muy corto, teniendo que soldarles un extremo adicional, para evitar que la alforja caiga de la parrilla con los saltos del camino, para evitar aún más este evento agregué un elástico que generó un sistema de contratracción evitando aún más la caída de la alforja.



Comparación entre el gancho corto y el largo para evitar la caída de la alforja de la parrilla.







Alforjas con ganchos largos y sistema de elástico que se ancla al extremo inferior de la parrilla.





Sin duda es un sistema que debe probarse en condicionas más adversas que las que podemos encontrar al pedalear en santiago. Cualquier comentario o consejo para ir mejorando nuestras alforjas es siempre bienvenido.